¿CÓMO IDENTIFICAR A TUS CLIENTES POTENCIALES?
¿A quién le estas vendiendo y quien realmente te está comprando? Es una buena pregunta para empezar a identificar a esas personas que quieres llegar, seamos realistas el cliente “fácil” no existe. Muchas veces creamos estrategias para generar resultados de negocio que al final nos hacen perder tanto tiempo como dinero, por no estar perfilados.
Conocer a tus clientes es lo más importante y aunque suene un poco ilógico a cuantos no nos ha pasado que invertimos en muchos medios queriendo atraer clientes, y que pasa, que al final llegan muchos, pero son muy pocos los que realmente cumplen con el perfil y las estrategias que planteamos terminan siendo poco efectivas. Por ejemplo, no se dirigen al mismo tipo de cliente un proyecto de casas a uno de departamentos aunque sean del mismo sector, mientras que el primero se dirige a un público que igual lo que más importa son los espacios más grandes, el segundo es para una persona que busca otro tipo de comodidades y quizás sea más por ubicación, como lo vimos en el blog pasado tiene que ver totalmente con el comportamiento de las generaciones a la hora de comprar.
No todos los clientes tienen las mismas necesidades ni los mismos gustos, por eso, es importante conocer a fondo a tus posibles clientes, aquellos que acuden normalmente a pedir información con el fin de extraer ciertos datos generales que te ayuden a diseñar estrategias de marketing específicas para cada segmento de clientes.
Una efectiva estrategia es a través de un estudio de mercado y segmentación, ya que gracias a esta información podrás conocer las características de las personas que normalmente acuden a tu negocio y así averiguar qué es lo que consumen. Además, debes conocer a tu competencia tanto directa como indirecta, para saber qué es lo que están ofreciendo ya que en base a ello también definirás las estrategias que vas a seguir para que los prospectos que estén interesados prefieran tener contacto contigo.
Una buena técnica es aplicar la ley de Pareto, si el 80% de nuestros ingresos corresponde con el 20% de nuestros clientes, es decir, si logramos identificar el pequeño grupo de clientes que representan casi la totalidad de nuestros ingresos, habremos encontrado nuestro cliente potencial.
Es fundamental conocer a nuestros clientes como si fuesen nuestros propios amigos, para saber sus necesidades y a partir de esa información saber en qué tenemos que enfocarnos para darles una solución y así nos ahorraremos tiempo y dinero.